domingo, 27 de octubre de 2019

Encuentro de investigadores. "Homenaje a Antonio Heredia Rufián". Alcalá la Real (Jaén), 25 y 26 de octubre 2019


Encuentro de investigadores
Homenaje a Antonio Heredia Rufián

Alcalá la Real (Jaén), 25 y 26 de octubre 2019



Durante los días 25 y 26 de octubre se ha celebrado en Alcalá la Real (Jaén) el IV Encuentro de Investigadores, Homenaje a Antonio Heredia Rufián, profesor e investigador local, organizado por el Área de Cultura de su Ayuntamiento bajo la dirección de Francisco Toro Ceballos y Domingo Murcia Rosales, con una alta participación (117 comunicaciones) que conformarán el volumen número 4 de Estudios dedicado a profundizar en el conocimiento de la Historia de referida ciudad.

Entre los trabajos presentados se incluye el que lleva como título “Nuevos documentos sobre los González Bailén”,  de Manuel Peláez del Rosal, cronista oficial de Priego de Córdoba,  y Antonio Moreno Hurtado, cronista oficial de Cabra. La comunicación cierra un ciclo sobre los prieguenses Alonso González Bailén (1547-1626) y su hijo Luis González Bailén (1580-1655), afamados maestros de cantería a caballo entre los siglos XVI y XVII, y autores de numerosas edificaciones repartidas entre Granada, Sevilla, Toledo, Écija, Cabra y Priego, entre otras poblaciones. 

En el caso presente se ha penetrado en un campo poco estudiado pero de gran interés como son las relaciones familiares, sociales y económicas de estos dos artistas, figuras claves en la escultura monumental del Siglo de Oro y en la difusión de mármoles y jaspes extraídos de las canteras de Carcabuey, Cabra y Luque, complementando sus biografías, ya incluidas en el Diccionario Biográfico Español editado por la Real Academia de la Historia.

Con este nuevo Encuentro la Noble y Leal Ciudad de Alcalá la Real, “Llave, Guarda y Defendimiento de los Reinos de Castilla”, continúa postulándose como Ciudad de Encuentros y Congresos.



lunes, 21 de octubre de 2019

ENTREVISTA. Manuel Pelaéz del Rosal: "Córdoba podría ser un sol y es un satélite.

ENTREVISTA. 
Manuel Pelaéz del Rosal: 
"Córdoba podría ser un sol y es un satélite".
ABC Córdoba, Domingo 6 de octubre.







Manuel Peláez del Rosal: «Córdoba podría ser un sol y es un satélite»


Miembro de la Real Academia de la Historia y cronista de Priego, es un jurista de largo recorrido con debilidad por los archivos



ARISTÓTELES MORENO / CÓRDOBA - :
Aunque su pasión juvenil era la historia, estudió Derecho por orden paterna. Eran los años en que la jerarquía familiar no se discutía. Hombre sin estudios, pero provisto de un incontestable sentido práctico de la vida, el padre de Manuel Peláez del Rosal asignó a sus hijos las carreras que juzgaba con futuro. El mayor, médico. Y el segundo, o sea él, abogado. Luego, el Derecho lo sedujo nada más pisar la Facultad de Granada y ha labrado una sólida trayectoria profesional a caballo entre la actividad docente y la práctica de la abogacía en despacho propio. Fue secretario general de la Conferencia de Rectores en 1978, es miembro de la Real Academia de la Historia y ejerce de cronista de su pueblo, Priego de Córdoba, desde nada menos que 1961.
A sus 77 años, mantiene una agenda profesional encomiable. Nos recibe en su despacho, atestado de manuales jurídicos por los cuatro costados.
¿Qué nos enseña el Derecho?
A vivir en paz. O, por lo menos, a pretenderlo. A vivir en orden, saber dónde están nuestras fronteras y cómo no invadir el espacio de otro.

¿Derecho y Justicia caminan de la mano?
Eso no. No todo el Derecho es justo. La Justicia es otra cosa. El Derecho es concreto y la justicia es abstracta. La justicia es la aspiración del derecho.
¿Una aspiración frustrada?
Sí, porque el litigante siempre cree que tiene razón. Y cuando no fallan a su favor es que se ha equivocado el juez. La Justicia no satisface, por lo general, al justiciable.
Y sin Derecho no hay convivencia.
Sin Derecho no hay convivencia. Permite ayudar a la convivencia. Si no existiera, la vida social sería un desastre. Lo que hace es reducir el conflicto restableciendo la convivencia.

«El Derecho nos enseña a vivir en paz y en orden, a saber dónde están nuestras fronteras y cómo no invadir el espacio del otro»

Se doctoró en Granada y se especializó en Roma en Derecho Procesal. Luego recaló en Barcelona, en cuya Universidad trabajó como profesor durante siete años. Sevilla y Salamanca fueron sus siguientes destinos y en 1978 se convirtió en secretario general de la Conferencia de Rectores, lo que le permitió entrar en contacto con las universidades europeas y vivir en primera línea la profunda transformación política de la Transición. En 1981 se trasladó a Córdoba y en 1989 abrió despacho propio, que compatibilizó con la docencia universitaria, un hecho inédito entonces en la UCO.
¿Y el Derecho Procesal es un ladrillazo o solo lo parece?
No. Tiene una leyenda negra. Pero es quizás la rama del Derecho más importante. Es la parte experimental. Es una asignatura complicada, bastante abstracta, con unos principios filosóficos muy fuertes. Las facultades de derecho no tienen un hospital para hacer prácticas. Eso lo han sufrido los colegios de abogados. Las escuelas jurídicas no han tenido éxito. En Barcelona, todos los profesores ejercían la abogacía. En Córdoba solo estaba yo entonces.
España figura en el grupo de países que más desconfianza sienten hacia el sistema judicial. ¿Hay razones para ello?
Creo que no. Es una leyenda. Un sambenito. España es como cualquier otro país de la UE. Quizás llegue pronto el día en que exista un solo código civil europeo.
¿Es factible?
Sería conveniente. Hay ahora unas relaciones muy fuertes en materia de extradición y órdenes judiciales europeas. Lo mismo se siente uno europeo en Lituania que en Gibraltar.

La mayoría de los que desconfían creen que la justicia está controlada por los partidos políticos.
La Justicia tiene un componente político. Pero creo que es independiente, aunque existan casos en que haya influencias o presión mediática. La justicia funciona. Otra cosa es que funcione según el deseo de cada uno.
Montesquieu no ha muerto.
Sigue vivo y cada vez más. La separación de poderes es necesaria.
¿Qué reforma urge?
Hacen falta muchos más órganos judiciales. Robustecer el poder judicial creando más juzgados y jueces bien preparados. En Barcelona ganamos un asunto y se lo comunicamos al cliente, que nos dijo: «Ah, ¿pero estaba todavía en el juzgado?». Se le había olvidado. Si la Justicia no es rápida no es eficaz.
La rapidez de la justicia es inversión y medios.
Sí. Hacen faltan más. Hace 50 años, en Praga había 300 jueces de primera instancia y en Madrid solo 35.


«Para el historiador, no debe haber vencedores ni vencidos. Tiene que ser objetivo, imparcial e independiente»

Es usted cronista de Priego desde 1961. ¿Qué le queda por saber de su pueblo?
Cada vez más. Tengo tantas fuentes y tanta información que no sé si me dará tiempo a analizarla. Ha habido un paso gigantesco en el acceso en los archivos y ahí está la historia de España. Ya se permite hacer fotografías. Creo que tengo buen conocimiento de mi ciudad.
Es usted miembro de la Academia de la Historia. ¿La historia es una ciencia o un arma arrojadiza entre contrarios?
Debe ser una ciencia con su metodología, su análisis, su estructura. La historia nos enseña qué ha sucedido para evitar caer dos veces en la misma piedra.
Hay veces en que la historia depende de quien la cuente.
El historiador debe ser objetivo, imparcial e independiente. Hoy hay una cierta contaminación de la historia. No se cuenta cómo sucedió sino cómo cree uno que sucedió o cómo desea que hubiera sucedido, lo cual es una contradicción.


¿La historia siempre la escriben los vencedores?
La escriben los historiadores. Y depende de dónde se sitúe uno. Para el historiador, no debe haber vencedores ni vencidos. Tiene que hacer historia desde la ecuanimidad y la independencia, y eso es lo que no se hace con frecuencia. Se toma partido y se deja de ser historiador.
¿Y qué dirá la historia de nosotros?
No van a llegar a entenderla muy bien. Córdoba es una ciudad con gran cultura y pasado. Estamos presionados por la historia. Pero el cordobés del futuro no nos va a entender muy bien.
¿Qué le va a costar entender?
Por qué no ha progresado. Córdoba está latente. No se nota su avance en todos los sentidos. Está detenida, como esperando.
¿Y cuál es el obstáculo?
Su propio ser. La apatía cordobesa. Hay una gran diferencia entre las capitales de provincia. El sevillano es más optimista y el cordobés más pesimista. El cordobés no invierte. Sigue siendo una ciudad de paso.
¿Y cómo es posible en solo 140 kilómetros de distancia?
No lo llego a entender. Quizás porque hay poca comunicación entre las capitales y cada una vive según su modo de ser.
¿Córdoba no está a la altura que le corresponde?
Está infravalorada y con el potencial que tiene podría ser una estrella en el universo con brillo muy intenso. Podría ser un sol y es un satélite.
Nuestro pasado nos deslumbra.
En cierta manera, sí. Con un pasado tan rico estamos todavía viviendo del cuento del pasado. Da gusto pasear por sus calles quizás como en ninguna otra ciudad de Europa. Tiene encanto y es un centro gastronómico por excelencia que debe explotarse más.
Usted fue secretario general de la Conferencia de Rectores en 1978. Ya ha llovido en la universidad española.
Ha cambiado muchísimo. El Plan Bolonia significa un antes y un después. Existe mucha diversificación y muchos títulos. También ha cambiado la función del profesor, que se ha convertido más en más administrativo que docente o investigador.
Cuatro elecciones en cuatro años. ¿Delito o tomadura de pelo?
El cambio de voto no se produce en tan poco espacio de tiempo. Es una sinrazón que haya esta frecuencia de llamarnos a las urnas.

sábado, 12 de octubre de 2019

XLV CONGRESO DE LA REAL ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE CRONISTAS OFICIALES.- Baeza, del 4 al 6 de octubre de 2019


XLV CONGRESO DE LA REAL ASOCIACIÓN ESPAÑOLA
 DE CRONISTAS OFICIALES

Baeza, del 4 al 6 de octubre de 2019


Durante los días 4 a 6 de octubre de 2019 se ha celebrado en la ciudad de Baeza (Jaén), Patrimonio de la Humanidad, el XLV Congreso de la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales, que preside el Dr. Antonio Luis Galiano Pérez.

La inauguración y clausura tuvieron lugar en el Paraninfo de la antigua Universidad y las sesiones se desarrollaron en apretado programa en el salón de la sede Antonio Machado de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA). La conferencia inaugural con el título “Baeza en el tiempo” fue pronunciada por José Luis Chicharro Chamorro, cronista oficial de la referida ciudad. Asimismo se celebró la habitual asamblea general ordinaria y se giraron visitas a los monumentos principales de la ciudad, con una excursión a Úbeda.

A este congreso se han presentado medio centenar de comunicaciones de temática libre y sobre la proyección de la Universidad y de la arquitectura renacentista de Baeza en España y América. En esta edición han participado dos cronistas mejicanos, 17 andaluces y el resto de diferentes villas y ciudades procedentes de Madrid, ambas Castillas, Murcia, Extremadura, Aragón, Valencia, Asturias y León.Los trabajos presentados integrarán las actas del Congreso que verán próximamente la luz.

Entre la relación del denso programa de comunicaciones se ha incluido la presentada por el cronista oficial de Priego de Córdoba Manuel Peláez del Rosal, con el título: “El nombramiento de cronista oficial: ¿exclusividad o concurrencia? Patologías”, en la que se plantean las tesis de la conveniencia de nombramiento de un solo cronista por población, frente a la tendencia cada vez más agudizada de plurales candidaturas con las consiguientes tensiones entre los diversos cronistas, así como la interdicción de someter a temporalidad la duración de su actividad ya plasmada en algún texto normativo, en contradicción con el carácter vitalicio del título honorífico de acuerdo con la tradición y práctica del municipalismo histórico español.

Imagen 01.-


Imagen 02.- A la derecha D. Manuel Peláez del Rosal.


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miércoles, 25 de septiembre de 2019

Congreso internacional “La Administración de Justicia en España y en América”. Homenaje al Prof. Dr. José de los Santos Martín Ostos, Sevilla, 19 y 20 de septiembre de 2019.


Congreso internacional 
“La Administración de Justicia en España y en América”.

Homenaje al Prof. Dr. José de los Santos Martín Ostos,

Sevilla, 19 y 20 de septiembre de 2019.

Durante los días 19 y 20 de septiembre se ha celebrado en el Salón de Grados de la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla en homenaje al Prof. Dr. José de los Santos Martín Ostos, catedrático de Derecho Procesal, un Congreso internacional con el título enunciado, al que han concurrido numerosos compañeros procedentes de universidades españolas y extranjeras.




La segunda mesa del congreso que trató sobre “La efectiva dirección de la investigación penal” estuvo presidida por el Prof. Dr. Manuel Peláez del Rosal, y en ella participaron los profs. Moreno Catena, de la Universidad Carlos III, Armenta Deu, de la Univeridad de Gerona y Asensio Mellado de la Universidad de Alicante.



Las actas del Congreso que recogerán todas las ponencia y comunicaciones verán próximamente la luz.


viernes, 9 de agosto de 2019

Manuel Peláez del Rosal.- Los orígenes de la ermita de Belén y sus alhajas según un inventario de 1751 (Priego de Córdoba).

LOS ORÍGENES DE LA ERMITA DE BELÉN
Y SUS ALHAJAS SEGÚN UN INVENTARIO DE 1751*

Por Manuel Peláez del Rosal
Cronista oficial de la ciudad de Priego de Córdoba

Publicado en la Revista de la Hermandad de Belén (Anuario)

Lienzo existente en el antiguo emplazamiento 
de la Huerta Palacio. Hoy desaparecido.

  
         Que Priego es un pueblo de hondas raíces religiosas cristianas es una cuestión que pocos, por no decir nadie, se atreve a discutir. Basta repasar su calendario festivo a lo largo del año para percatarnos de esta singularidad que destaca sobre la de muchas otras poblaciones de la provincia e incluso de Andalucía. Y un ejemplo palpable de ello lo tenemos en la devoción a la Virgen de Belén, que se exterioriza a mediados de agosto y a finales de diciembre, meses en los que recibe culto la imagen titular que se entroniza en la ermita de su nombre, la ermita de Belén, en el popular barrio de la Huerta Palacio.

         No me había acercado a esta ventana cultural, sin olvidar su enjundia devota, desde que en 1986 publiqué el libro La Pastorela[1], llevado entonces por el ánimo de escarbar en las raíces costumbristas de su representación, y de volver a poner en escena este “juguete cómico” (entendida sea la palabra en su sentido más purista, sin connotaciones laicistas) clavado en mi memoria de niño desde hacía más de siete décadas, cuando aún existía en el Palenque el Teatro Principal, prácticamente desaparecido del recuerdo imaginario, y en donde con estruendos de zambombas languidecía la tradición navideña.

Desde entonces algunos espíritus sensibles y con entusiasmo, se han dedicado a ponderar y pregonar la fiesta, como lo hizo recientementeJosé María del Pino en 2006, exaltando el misterio con ocasión de celebrarse el primer centenario de la adquisición de la imagen que hiciera en 1905 el artista valenciano Vicente Tena, traída a Priego al año siguiente. Y ha sido ahora el alma inquieta de mi entrañable amigo Francisco AntonioMonje quien me ha invitado a colaborar en esta publicación, lo que hago muy gustosamente, despertando el gusanillo de la investigación y aportando nuevos datos para su constancia y preservación, máxime cuando correnlos nuevos aires que han tocado a rebato con un coro, un blog, una ruta de belenes y una revista que da cuenta de las noticias y de los proyectos de la ahora denominada Hermandad de la Sagrada Familia de Belén.

Pues bien. La ermita de Belén en Priego no es, como se ha reiterado hasta la saciedad, una “invención del siglo XVIII”, sino que hay rastros documentales e indicios que la remontan al siglo XVI, centuria en la que ya existió un edificio en el arrabal de la Huerta Palacio, que como su propio nombre indica fue un predio propiedad de los Herrera[2], parientes de los marqueses de Priego y por aquellos tiempos gobernadores en lo civil y en lo militar del “concejo, justicia y regimiento” de la villa . El dato que hemos localizado entre la documentación existente en el Archivo Histórico Provincial de Córdoba es importante, porque nos retrotrae por lo menos a dos siglos antes de la fecha en la que se suponía y sustentaba como la originaria. Lo curioso del caso es que en las Constituciones sinodales publicadas en el año 1542 en Alcalá de Henares por don Juan Dávila y Arias, abad que fue de Alcalá la Real durante más de medio siglo (1503-1556) al citar las iglesiasde la abadía a la que pertenecía nuestra ciudad dice que había “…en Alcala la Real: sant Juan Baptista, san Sebastian, sancta Anna. En Priego: sancto Nicasio, sant Anton (hoy Mercedes), sant Sebastian (hoy Cabeza), santLuys (desaparecida). En Castillo de Locubin: sant Sebastian, Nuestra Señora de los Remedios, JesusMaria, la Concepcion. En Carcabuey: san Marcos”.

Claro está que la referencia es a los templos entonces considerados como “ermitas” del extrarradio, de fuera del casco urbano, diríamos hoy, y no a las restantes iglesias mayores como las unidas de Santa María y Santiago (la parroquiadcspués de la Asunción) o a las conventuales, como la de San Francisco, ambas con rango de mayor entidad, que omite, por lo que con mayor razón la fuenteimpresa no tiene en cuenta otros espacios de culto de menor entidad, como los beaterios o capillas de culto, como sería el caso que nos ocupa[3]. Pero el dato está ahí y habrá que continuar por la senda emprendida para encontrar más noticias al respecto que hablen de su antigüedad.

Efectivamente la ermita de Belén se construyó “nuevamente” entre los años 1741 y 1747, con mucha fatiga, por cierto, y también es conocido que los fundadores fueron Luis de Luque, Juan Manuel Carrillo, Francisco Javier de Lucena y Esteban Martín, quienes presentaron un memorial que se vio en el cabildo municipal celebrado el 13 de marzo de 1741solicitando licencia para tomar una corta porción que necesitaban de la calle llamadaEnmedio de la Huerta Palacio, para en el solar elegido poder edificar la ermita que intentaban hacer dedicada a Nuestra Señora de Belén, “que antes estaba en el arco que se demolió por amenazar ruina”[4].

Según este documento sabemos que la antigua o anterior ermita estaba situada en la calle Huerta Palacio, tal vez -me atrevo a afirmar- en la casa que lucía hasta hace pocos años una hornacina con un lienzo alusivo, más abajo de la que fue casa solariega del obispo-arzobispo Caballero y Góngora, tío de don Juan Gualberto Caballero y León[5], que fue uno de los fundadores de la denominada Confraternidad de Nuestra Señora de Belén, en el último tercio del siglo XVIII, predecesora de la actual hermandad.

En 1751, diez años después de la petición para construir la nueva ermita, en un inventario[6] de las iglesias y ermitas de Priego existentes en aquella fecha, que se encuentra en el Archivo de la Parroquia de la Asunción, el capellán que se llamaba Francisco Antoniorelaciona el ajuar(las alhajas) que tenía la ermita:

-“En el altar (existe) una hechura de un Niño Jesús de yeso con sus colores y otra hechura de señor San Antonio de los mismo”.
-“Más ocho láminas de papel con diferentes hechuras”.
-“Mas dos pares de manteles de tiradizo para dicho altar; los unos fueron de limosna y los otros se compraron con la limosna de los devotos”.
-“Más dos pares de palias (trozo de tela almidonada para tapar el cáliz durante la misa) para dicho altar con encajes”.
-“Más dos cortinas de tafetán carmesí”.
-“Más tiene cuatro lienzos de pintura basta”.
-“Más dos velos de tafetán, el uno verde, y el otro de color de oro para adorno de la dicha imagen”.
-“Más tiene la imagen un corazón de plata de una onza. Tiene una lámpara de azófar(latón)”.
-“Más tiene dos pares de bugías de azófar”.
-“Mas tiene un frontal de pintura”.
-“Más tiene cuatro lienzos de pintura pequeños”.
-“Más tiene una campana en la torre”.
-“Más tiene la ermita unos asientos a modo de escaños tomados con yeso a la pared”.
-“Más tiene la sacristía de dicha ermita un cajón, el que dio la Santa Iglesia, y los devotos le hicieron una gaveta (cajón corredizo), en la cual hay dos recados (vestimentas) para celebrar, el uno de tafetán raso demediado, y el otro de tafetán verde”.
-“Más dos amitos (prenda de tela que cubre el cuello y la espalda del sacerdote en ceremonias religiosas), el uno de la santa iglesia, y el otro lo dieron de limosna”.
-“Más un alba de crea (tela de hilo) con encajes”.
-“Más un cáliz con su patena”.
-“Más dos pares de corporales de bretaña de los devotos”.
-“Más un espejo, el que dieron de limosna”.
-“Más un sillón viejo”.
-“Más un arca para el uso de dicha sacristía”.
-“Más dos lienzos de pintura basta”.

         Un breve comentario nos suscita esta relación expresiva de la actividad de la ermita a mediados del siglo XVIII. Llama la atención el culto que se tributaba al Niño Jesús y a San Antonio y la existencia de pinturas y granados (diez lienzos y ocho láminas) que no sabemos qué representarían y que desgraciadamente no se nos han conservado, pero que posiblemente procedieran de la ermitaantigua, anterior a la terminada en 1747, y sin duda alguna con escenas de la Virgen. Asimismo nos sorprende el abundante ajuar existente entre los bienes de la ermita y las aportaciones y limosnas de los devotos para su culto y uso, la campana de la torre para llamar a misa y otras prácticas religiosas y los asientos de mampostería pegados a los muros perimetrales interiores, aunque de yeso, y no de madera como los que aún conserva la ermita de la Virgen de la Aurora.

         Dejamos para otra ocasión historiar la vida de los personajes sobresalientes que contribuyeron a fomentar el culto de la Virgen de Belén, como el ya referido sobrino del obispo Caballero, don Juan Gualberto. También merecen un comentario los estatutos de la Hermandad del año 1913. Y seguimos con el empeño de que vuelva a representarse la Pastorela por Navidad, de la que se conserva no solo el texto, sino también la música y a mayor abundamiento viven todavía muchas personas que recuerdan el regocijo que producía no solo a los pequeños, sino también a los mayores, y que se prestarían a que se haga como antaño.

¡Ánimo, Hermandad!


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[1] Peláez del Rosal, M. y Ocaña Vergara, J.,La Pastorela,Tipografía Católica, Córdoba, 1986.
[2] Peláez del Rosal, “Los Herrera, una familia de poderosos en el Priego del S. XVI”, en Revista Fuente del Rey, nsº 93-94 (1991), pp.12-15 y 18-20.
[3]Que ningunclerigo ni lego administre ni tenga hermita. Y que los hermitaños esten en ellas con nuestra licencia y no de otra manera. Y den cuenta de los bienes y rentas y limosnas de las dichas hermitas a los mayordomos que los recibieren. Y que no pidan limosna para ellas sin nuestra licencia. Y memoria de las hermitas de nuestra abbadia” (Capitulo XVIII, Título V, de las Constituciones de 1542).
[4] Archivo Municipal de Priego (AMP), leg. 16 (1741-1750).
[5] Fue racionero entero o prebendado de la catedral de Córdoba, cfr. Díaz Rodríguez, A. J., “Diccionario biográfico de la catedral de Córdoba (I): Los miembros del cabildo en época moderna”, enHistoria y genealogía nº 5 (2015), p. 97.
[6] Hemos actualizado la grafía del documento para una mejor comprensión.